Historia
Inicio Europa, Siglo XVIII La doble revolución

La doble revolución

Publicado por Hilda

La doble revoluciónSe conoce como doble revolución a dos procesos de cambios radicales que ocurrieron en Europa en el siglo XVIII, uno de tipo económico-social y pacífico, originado en Inglaterra, pero que luego se extendió a nivel mundial, la Revolución Industrial, y otro de índole sociopolítico y violento, la Revolución Francesa, que si bien tuvo inicio en Francia, sembró los gérmenes de la libertad en todo el planeta; pero que no pueden explicarse uno sin el otro.

A partir del siglo XV, con el auge de la vida urbana y el crecimiento del comercio estimulado por el tráfico con el Nuevo Mundo, los comerciantes fueron adquiriendo riquezas materiales, dentro de un contexto político opresivo, ya que las monarquías absolutistas retenían privilegios para sí mismas, la nobleza y el clero; pero no para el común de la población (sean ricos o pobres) que formaban el estado llano, los que debían soportar toda la presión impositiva (especialmente los ricos) para mantener a una Corte corrupta y holgazana.

La gran demanda de productos, en especial el requerimiento de telas, y los avances tecnológicos hicieron surgir en Inglaterra, una unidad de trabajo especializado, las fábricas, abandonándose la producción artesanal en forma paulatina y comenzando la producción de artículos en serie, con personal que operaba las máquinas en forma rutinaria y sin descanso.

Las ganancias fabriles abultaran las riquezas de los dueños o empresarios, llamados burgueses, quienes sintieron un enorme poder económico en sus manos, lo que los llevó a ambicionar el poder político, y terminar con los privilegios de sangre y cuna; para poder ellos gozar de los beneficios de sus riquezas materiales y extender la dominación que ya ejercían sobre los obreros. Así, fue la burguesía la que encabezó la lucha contra el rey, la nobleza y los privilegios feudales, seguida por una clase obrera que con ellos compartía el dominio de un poder monárquico hostil; pero que en definitiva, una vez destruido, los puso bajo el poder ya no solo económico sino político de los ricos, ante lo cual surgieron las ideas socialistas y comunistas.