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Historia de Japón

Publicado por Hilda

Religion de JapónAunque los testimonios escritos de esta civilización datan del siglo I, ya desde el neolítico, pobladores pertenecientes a la raza ainu, habitaron el archipiélago de Japón, provenientes del sudeste de China y de Corea.

Estos primitivos habitantes, debieron replegarse hacia el norte del territorio, pues otros pueblos fueron ocupando el resto del archipiélago.

Los ainu eran corpulentos, con cabellos enrulados, y las mujeres se tatuaban bigotes. Sus viviendas eran construidas con caña y eran cazadores, pescadores y artesanos, trabajando la madera, la cerámica, y realizando tejidos en fibra vegetal.

China ejerció influencia sobre Japón en este primer período, estableciendo vínculos comerciales e imponiendo su cultura. Con Corea, la relación fue de conflictos bélicos.

Este primer período conocido como Jomon, abarcó desde los años 10000 a 3000 a.C.

En el siglo IV de la era cristiana se constituyó el reino de Japón. Este período es conocido como Yayoi. Desde la India, su país originario, el budismo pasó a China y Corea, y desde allí ingresó a Japón.

En el año 300, se inició una nueva etapa llamada Kofun, donde se consolidó el imperio, bajo la influencia del emperador Jimmu, que desde Kyushu, gran isla ubicada al sur del archipiélago, inició una política expansionista, que llegó hasta Yamato (actual prefectura de Nara) en la isla principal de Japón.

Mapa de NaraEl sistema político en Japón, desde el año 645, fue, por influencia del establecido en China, el de las monarquías absolutas. El Mikado, dinastía japonesa, estableció su capital en Nara, en el año 710, iniciándose el período Nara. Sin embargo el control del estado estuvo en manos de la poderosa familia de los Fujiwaras, que nunca fueron reyes, pero ejercieron influencias decisivas en cuestiones de gobierno. En el año 794, la capital fue trasladada a Heian, actual Kyoto, conociéndose esta etapa como Heian que se extendió desde 794 a 1185.

La familia de los Fujiwaras, fue reemplazada como centro de poder, por la de los Minamoto. En el año 1185, un miembro de esa familia, recibió el título de shogun, de carácter hereditario. La figura del emperador era meramente simbólica.

En torno a esta familia gobernante, se originó una sociedad guerrera y feudal, destacándose los samurai, soldados profesionales dotados de un código de honor, que les imponía la lucha por su señor y su reino, hasta las últimas consecuencias.

Los mongoles, que trataron de apoderarse de las islas, sucumbieron ante las fuerzas japonesas en su primer intento, y por las inclemencias naturales en el segundo, ya que las flotas mongolas fueron destruidas por un violento tifón, llamado a partir de entonces, kamikase, que significa “viento divino”. El nombre de kamikase fue asignado posteriormente, en la Segunda Guerra Mundial, para designar a los pilotos suicidas, que estrellaban sus aviones contra los enemigos.

Japón no mantuvo contacto con occidente hasta mediados del siglo XVI. Los europeos que arribaron hacia el año 1542, les enseñaron a construir fortificaciones y a usar armas de fuego, en una economía que se había mantenido basada en la agricultura, con enfrentamientos bélicos entre clanes.

En el año 1607, los nuevos shoguns, pertenecieron a la familia de los Tokugawa, ejerciendo un mando despótico, con una fuerte intervención estatal.

Si bien en un principio los europeos fueron bien recibidos y el cristianismo prosperó, en 1638, se cerró todo vínculo con Europa, y el cristianismo fue prohibido, siendo vista la cultura de los extranjeros como contraria, opuesta y negativa para la propia. Los puertos fueron cerrados a los europeos, negándose incluso a recibir a los japoneses que residían fuera de su tierra.

Continuaron sin embargo, sus relaciones comerciales con China, y la apertura al mundo occidental, fue lograda a través de los holandeses, quienes los pusieron en contacto con avances científicos, sobre todo con respecto a la medicina.

En 1853, se firmó el Tratado de Kanagawa, debido a un ataque estadounidense, que los obligó a iniciar negociaciones comerciales con occidente.

En el período de la familia Tokugawa, comenzó el proceso de urbanización, con el crecimiento de una clase comerciante, destacándose la ciudad de Yedo.

Los conflictos exteriores cesaron, lo que creó una clase militar ociosa, la población creció de manera considerable y renació el sintoísmo, su religión originaria. En 1867, se produjo el ocaso de la familia Tokugawa y se comenzó un acercamiento al mundo occidental.

Todo cambió cuando el trono japonés fue ocupado por el emperador Mutsu-Hito, conocido póstumamente como el emperador Meiji, en 1867, que transformó a su país en un estado moderno. Los cargos de shogun les habían correspondido a la familia Hojo y en 1336, a la familia Ashikaga desaparecieron con el emperador Mutsu-Hito, que terminó con el predominio de cargos familiares hereditarios. Los japoneses que eran considerados como inferiores, por sus vecinos chinos, apodados por ellos “piratas enanos”, ocuparon Formosa en 1895, tras inflingirles una aplastante derrota.

Rusia, una gran potencia militar debió soportar que en 1905, los japoneses la vencieran.

Durante la Primera Guerra Mundial, ocuparon la base alemana de Kiao.Tchen, ubicada en la China continental y las islas alemanas al norte del Pacífico.

Al finalizar la Primera Guerra Mundial, Japón debió aceptar límites en su equipamiento militar, pero los occidentales debieron a su vez, abstenerse de construir bases en una considerable zona del Pacífico.

Japón se había convertido en una potencia naval, y pronto, en una industrial.

Durante la crisis mundial de 1929, la democracia japonesa atravesó un período agónico. Su economía se vio resquebrajada al bajar el precio de su principal producto de exportación: la seda, y el ejército comenzó a dominar la vida política del estado.

Entre 1931 y 1936 se sucedieron campañas militares al norte de China, con una política expansionista basada en el principio alemán, de la necesidad de “espacio vital”. En 1933 se produjo la invasión de Manchuria, al norte de China, donde los japoneses impusieron un gobierno fiel a sus determinaciones (gobierno títere) llamado Manchukuo, y en 1937 se produjo la ocupación de China.

Japón firmó con la Alemania nazi, una alianza en 1936, unidas ambas, por un nacionalismo agresivo.

Enfrentado con Estados Unidos, los japoneses debieron soportar represalias económicas, que culminaron durante la Segunda Mundial, con el ataque de Pearl Harbor por parte de Japón a Estados Unidos.

Esta gran contienda mundial, tuvo su punto culminante, cuando tras la resistencia japonesa y su negativa de rendición, estallaron en su territorio, las fatídicas bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki, que terminó con los planes imperialistas japoneses.

La ocupación militar de Estados Unidos en el territorio de Japón se extendió hasta 1951. A partir de esa fecha el empeño y el espíritu creativo y trabajador del pueblo japonés, ha colocado a su nación, entre las más ricas, modernas y evolucionadas del planeta, llegándose a hablar de un “milagro económico”.

Bandera de JapónEste adelanto y su acercamiento al mundo democrático, le permitieron el ingreso a la ONU, el 18 de diciembre de 1956, siendo miembro no permanente del Consejo de Seguridad en ocho oportunidades. Desde 1960, se constituyó como miembro regular del Consejo Económico y Social. Sus costumbres místicas fueron atenuadas, entre ellas, la divinización de su emperador. El Poder Ejecutivo quedó a cargo de un Primer Ministro, actualmente, desempeñado por Junichiro Koizumi. El Legislativo en la Dieta, formada por la Cámara de Representantes y la de Consejeros, donde tiene preeminencia el PLD (Partido liberal democrático). El Poder Judicial está constituido por la Corte Suprema de Justicia y tribunales inferiores.

En 1972 recuperaron la isla de Okinawa, en poder de Estados Unidos.

En 1992, se permitió legalmente la participación de las fuerzas japonesas en las operaciones de paz de la ONU, siguiendo en el camino de cooperación a nivel internacional, luchando a favor del desarme y en pro de la paz y la seguridad, aportando cuotas obligatorias, voluntarias y recursos humanos.

Desde hace años, Japón ha presionado por ingresar en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. A comienzos de este año, 2007, Condoleezza Rice, Secretaria de Estado norteamericana ha respaldado esta posibilidad, pero a cambio de que Japón deje de boicotear el ingreso de carne proveniente de Estados Unidos, alegando que las vacas americanas se encuentran infectadas.