Historia
Inicio Edad Antigua, Roma La Fundación de Roma

La Fundación de Roma

Publicado por Hilda

La loba romanaLA LEYENDA

La fundación de Roma se ha mantenido envuelta en la leyenda, ya que no existen testimonios escritos sobre los hechos acaecidos.

Recién en el siglo V a.C. algunos historiadores griegos se refirieron a la fundación de Roma por el héroe troyano Eneas. La primera obra histórica romana, que no se conservó, salvo algunas citas, perteneció al senador Quinto Fabio Píctor, y estaba escrita en griego. Allí se hacía referencia a Rómulo como fundador de Roma. Posteriormente la historia romana, plagada de mitos, fue consolidada por las obras de Virgilio, Ovidio y Tito Livio.

Estas versiones, de dudosa autenticidad, refieren a que el héroe troyano Eneas, pudo huir de su ciudad antes que fuera destruida, durante la guerra de Troya, por los ejércitos del griego Agamenón.

Eneas, padeció muchas desventuras durante su paso por el mar Mediterráneo. Relata Virgilio, en la Eneida, que cuando Eneas llegó a Cartago, se enamoró, siendo correspondido por la reina Dido o Elisa, quien le pide que se quede junto a ella.

Sin embargo, es más fuerte para Eneas cumplir la voluntad del dios Júpiter, que le había ordenado fundar una ciudad nueva, y eso motivó que abandone a la reina cartaginesa, quien presa de un inmenso dolor se suicidó, utilizando la espada que Eneas había dejado al partir.

Este relato es un posible intento de explicación de la discordia que siempre existió entre romanos y cartagineses.

Eneas arribó al Lacio, lugar en el que fundó la ciudad de Lavinium. A su muerte, su hijo, Cayo Ascanio, se dirigió al centro de Italia, en los montes albanos, donde fundó una ciudad, (a mediados del siglo XII a. C) a la que denominó Alba Longa. En ella reinaron los sucesores latinos de Eneas, durante cuatrocientos años, hasta que se originó una disputa por el poder entre los hermanos Numitor y Amulio, hijos del rey Procas. Numitor asumió el trono, pero Amulio lo derrocó.

Numitor tenía una hija, Rea Silvia, que despertó el temor de Amulio por la idea de que esta o su descendencia en el caso de algún día la tuviera, decidieran vengarse de él, lo cual fue confirmado proféticamente.

Por ese motivo, consagró a su sobrina como sacerdotisa vestal, o sea encargada de mantener encendido el fuego sagrado en honor a la diosa Vesta, función que requería conservar la virginidad. Pero el Dios Marte y Rea Silvia se enamoraron, y de esa unión nacieron los gemelos, Rómulo y Remo.

Amulio ordenó dar muerte a los gemelos, pues según una profecía, éstos serían los encargados de vengar la muerte de su abuelo, orden que fue desoída por el siervo encargado de la misión, quien los colocó en una bolsa que dejó en la orillas del río Tíber. Los niños, llevados por la corriente, llegaron a un lugar que no está determinado, donde supuestamente fueron amamantados por una loba llamada Luperca. Otros autores sostienen que quien se encargó de los pequeños, fue la esposa del pastor Fáustulo, de nombre Acca Laurencia, a la que apodaban “La Loba” porque era asidua concurrente de los lupanares (prostíbulos).

Rómulo y Remo, al hacerse adultos, derrocaron a Amulio y restablecieron en el trono a su abuelo, quien los recompensó otorgándoles tierras, donde ellos pudieran fundar su propio reino. El lugar seleccionado fue el septimonium, ubicado en un lugar cercano a siete colinas (Quirinal, Viminal, Esquilino, Aventino, Celio, Cpitolio y Palatino).

El problema se suscitó en saber a cual de los dos hermanos le correspondería el trono, decidiendo los dioses, al consultarse el vuelo de las aves, que el trono sería para Rómulo (aparentemente el que viera volar más aves sería el elegido). Éste marcó los límites de la ciudad, escogiendo el Palatino, entre las siete colinas existentes en la desembocadura del río Tiber, donde se levantarían las murallas, con un arado, lo que provocó la burla de Remo, quien saltó sobre los surcos.

Rómulo castigó a su propio hermano con la muerte, ya que los muros y puertas de las ciudades eran consideradas cosas santas y quiso demostrar con este acto, que nadie quedaba exento del cumplimiento de las normas.

Esta leyenda conserva varias semejanzas con el origen del imperio persa, ya que Ciro también había sido abandonado al nacer, pues el rey medo Astiages, había prometido darle muerte. También salvó milagrosamente su vida, por la intervención de una perra y luego fundó un imperio (si bien Rómulo sólo fundó una ciudad).

Seguramente la autenticidad histórica de este relato es sumamente discutible y no ha podido probarse.

Sin embargo hay datos que pueden resultar relevantes, como la importancia de ciertos centros religiosos en Lavinium y Alba Longa. En esta zona se han hallado restos arqueológicos de antiguos asentamientos. Lo que no ha podido establecerse es que Roma haya sido fundada con posterioridad a esas ciudades, ya que aparentemente los restos encontrados se remontarían a fechas similares. Aparentemente los cuatrocientos años que median entre la llegada de Eneas, y la fundación de Roma por Rómulo, donde hubo una dinastía de reyes en Alba, sería fruto de la leyenda popular.

La fecha exacta de la fundación de Roma también es un hecho muy cuestionable. Los romanos estaban de acuerdo en que su ciudad fue fundada en el siglo VII a. C., pero el año exacto no fue determinado fehacientemente. Hubo muchas fechas tentativas. Así por ejemplo, el ya citado Fabio Píctor, estableció para este acontecimiento el año 748.

Fue a fines de la República cuando se adoptó como fecha, el 21 de abril del año 753 a. C., a propuesta del erudito, Terencio Varrón. El 21 de abril se escogió por ser un día festivo, consagrado a Pales, diosa de los pastores. Sin embargo se han encontrado tumbas en el valle del Foro, que aparentemente remontarían al sigo X a. C.

El nombre de Roma no es menos discutido, ya que algunos lo atribuyen a Rómulo, su fundador, mientras que la teoría con más adeptos es la que lo hace derivar de Rumon, designación etrusca del río Tíber.

El rapto de las sabinasEL RAPTO DE LAS SABINAS

Ya fundada la ciudad de Roma se presentó el inconveniente de que no existían mujeres. Para procurárselas, el rey invitó a un festejo al pueblo vecino de los sabinos, con el propósito de que en un momento determinado cada uno de los romanos tomaría una de las mujeres solteras invitadas y se la llevaría consigo a Roma. Esto sucedió, pero el rey Rómulo no escogió mujer soltera, sino a la esposa del rey de los sabinos, llamada Hersilia. Enfrentados Rómulo y el esposo de Hersilia, éste último resultó muerto, y las damas sabinas se manifestaron contrarias al desarrollo de una guerra, ya que estaban muy conformes con su nuevo estado de esposas de los ciudadanos romanos. Los romanos se caracterizaron por el buen trato dado a sus mujeres.

Con este hecho se selló la paz entre romanos y sabinos, al punto que se llegó a un acuerdo por el cual muchos sabinos se trasladaron a Roma, y el trono sería ocupado por un latino y un sabino. Junto a Rómulo gobernó el sabino Tito Tacio, aunque este rey sabino falleció muy pronto.

A partir de entonces, se dispuso que gobernarían alternativamente, un romano y un sabino.

Sin tomarse como absolutamente verídico este relato, lo que sí es certero, es que hubo muchos elementos sabinos en la constitución poblacional de Roma. Roma habría surgido de la fusión de dos comunidades, la del Palatino y la del Quirinal. De esta última comunidad los ciudadanos romanos habrían recibido el nombre de quirites.