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Lucio Tarquino el Soberbio

Publicado por Sebastián

Lucio Tarquino es denominado “El Soberbio” por la brutalidad y despotismo con el que gobernó Roma. El tirano dictador nació en el 534 a.C y murió en el 509 a.C.

Lucio Tarquino provenía de una influyente familia etrusca, lo que facilitó su ascenso en la sociedad romana. Se cree que su padre, Tarquinio Prisco, también desempeñó un papel en el poder antes que él.

Esta ascendencia etrusca fue una influencia significativa en su gobierno, ya que varios aspectos de la cultura etrusca se integraron en las prácticas romanas durante su reinado. La ambición y el deseo de consolidar su poder fueron rasgos que Tarquino heredó de sus antepasados, y su educación fue marcada por la política y la estrategia militar.

Algunas de sus medidas fueron la de tener una guardia personal organizada, limitó las posibilidades de acción del Senado y fustigó a la población con fuertes impuestos y prestaciones personales. tarquinio.jpg

Durante su reinado, Lucio Tarquino llevó a cabo campañas militares dirigidas a expandir y consolidar el dominio romano en la región del Lacio.

Estableció alianzas estratégicas y dirigió incursiones contra pueblos vecinos. Uno de sus mayores logros fue la firma del tratado con los cartagineses, asegurando así la estabilidad en la región y evitando intervenciones externas que pudieran amenazar su dominio en Lacio.

Pero vayamos a cómo accedió al poder, según las fuentes, lo hizo asesinando a su suegro, Servio Tulio, que estaba en el trono.

Existen versiones que involucran el advenimiento de este tirano hacia el poder mediante acciones conjuntas con otros grupos de romanos y etruscos asentados en Roma, actuando como una verdadera banda delictiva.

Se señala que su gestión en el poder apuntó a que Roma ocupara una posición privilegiada en el Lacio. Para poder llegar a este objetivo pactó acuerdos con comunidades como la de Gabii. Fue así que reforzó su poderío mediante este y otros acuerdos en la costa del Lacio, en ciudades como Terracina, Ardea, Circeo y Anzio.

Lucio Tarquino también fue notable por sus esfuerzos en la mejora de la infraestructura de Roma. Inició varios proyectos de construcción que no solo embellecieron la ciudad sino que también fomentaron la cohesión cultural.

Entre sus contribuciones se encuentran la ampliación de las redes viales y el mejoramiento de los sistemas de alcantarillado, facilitando así el crecimiento urbano y la mejora de la calidad de vida de sus habitantes.

Además, la estrategia para estos objetivos fue la de estimular el culto de Júpiter. En este sentido organizó el culto y acabó el Templo del Capitolio. Fueron treinta los pueblos que se asociaron al culto desde las colinas albanas más otras comunidades latinas que formaban en total unas 47 que todos los años se reunían para llevar a cabo el ritual. Se construyó entonces con los mejores artesanos y artistas de Etruria, como el caso del autor de la estatua de Júpiter, Vulca para llevar a cabo el templo que buscaba ser el más grande de Italia.

Esta supremacía de Roma en el Lacio tiene una materialización en lo que es el tratado romano–cartaginés por el cual los cartagineses realizaban un compromiso de no promoción de ningún trabajo de fortificación en el Lacio y tampoco de dañar de ninguna forma a los pueblos de Laurento, Anzio, Ardea, Circeo y Terracina así como tampoco ninguna otra bajo la hegemonía romana.

Fue derrocado tras el hecho que involucró a su hijo Sexto Tarquino como violador de Lucrecia. Aunque hay fuentes que señalan que esto no fue el único o más importante motivo de su destronamiento sino que se gestó una conjura palaciega contra él.

Se menciona que quienes se oponían de alguna forma a su gestión cuestionaban que no valorara lo suficiente a lo tradicional. También había resistencia contra su política constante de conquistas para lo que se requería de un desgaste de las reservas militares.

Otra de las razones ha sido la invasión de Roma por Porsenna, el rey de la ciudad etrusca de Clasium o Chiusi que llegó a Roma apoderándose de ella. Allí estableció una base para lograr su objetivo que era dominar Lacio y emprendió allí campañas contra la Liga Latina. A partir de esto Tarquinio fue exiliado en Tusculum y después en Cumas.

Más allá que luego las tropas de Porsenna fueran derrotados por los Latinos con el apoyo de Aristodemo de Cumas que era un amigo cercano de Tarquinio, éste no retornó y continuó en el exilio hasta morir en el 495.

Mientras tanto con estos hechos de la victoria latina sobre las tropas de Porsenna, Roma es liberada y el nuevo contexto político y constitucional hicieron que ya no se concibiera un trono o monarca para gobernar Roma por lo que tiranos como Tarquinio no fueron admitidos jamás. Es así que este fue el último rey de Roma.