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Georges-Jacques Danton

Publicado por Hilda

DantonNació en la comuna francesa de Arcis-sur-Aube, el 26 de octubre de 1759. Tuvo una niñez trágica, ya que creció en un asilo a partir de los tres años, cuando su madre, al quedar viuda, no pudo hacerse cargo de sus seis hijos. Además, sufrió un accidente a causa de la embestida de un toro, que le dejó graves secuelas en su rostro. Su educación fue esencialmente religiosa, pero libre, comenzando en un seminario de Troyes y luego en los oratorios del mismo lugar, aunque su vocación religiosa nunca despertó, y se inclinó por estudiar las leyes humanas, recibiéndose de abogado, en la facultad de Reims, e instalándose en París, donde contrajo matrimonio con una mujer de fortuna, lo que le permitió acceder mediante compra de cargo, al Consejo del Rey en 1787, en calidad de abogado.

De ideas liberales, y contrarias, por lo tanto, al absolutismo monárquico, participó activamente en la Revolución Francesa de 1789, presidiendo el Club de los Cordeliers, integrado, entre otros por Marat y Desmoulins, nombre que tomó por el lugar donde funcionaba: el Convento de los Cordeliers, monjes franciscanos, que usaban un cordel en su hábito, también llamado, Sociedad de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, con fines revolucionarios radicales y de ayuda a las clases más necesitadas, fundado el 27 de abril de 1790, en París. Si bien diferían en algunas cuestiones con los jacobinos, tenían bastante relación.

El 15 de julio de 1791, los cordeliers solicitaron el fin de la Monarquía y el establecimiento de la República. Dos días después los manifestantes fueron fusilados en Campo de Marte, y Danton logró huir hacia Inglaterra.

Lograda ya la sanción de una constitución que limitaba los poderes del Rey por un Parlamento, en septiembre de 1791; en el mes de octubre los revolucionaros, observaron una reacción contrarrevolucionaria desde el interior el país, a favor de la Monarquía. Con el objeto de erradicar toda reacción contraria a los fines de libertad, igualdad y fraternidad, se organizó un asalto al Palacio de las Tullerías, residencia de los reyes, desde que intentaron huir a la actual Bélgica, y fueron detenidos en Varennes, el 10 de agosto de 1792. En este asalto, Danton tuvo gran protagonismo, luego del regreso de su exilio en Inglaterra, en noviembre de 1791, dando por finalizado el gobierno del Rey.

Danton fue nombrado por la Asamblea, Ministro de Justicia, y un mes más tarde iba a ser el responsable de las famosas matanzas de septiembre, mes que comenzó a funcionar la Convención Nacional Constituyente como nuevo órgano de gobierno, entre cuyos miembros se contó, integrando el sector de los montañeses, junto a los jacobinos.

La Convención inició sus sesiones el 21 de septiembre de 1792, bajo la gestión de los girondinos, de ideas moderadas, para quienes Danton representaba un peligro por sus ideas radicales. Lo enviaron en misión diplomática a Bélgica, territorio que pretendían anexar a la causa revolucionaria. En esta etapa a pesar de la preeminencia girondina, se declaró la guerra a Austria, siendo vanos sus intentos de resolver los conflictos por vía diplomática, y fue sentenciado y condenado a muerte, el monarca Luis XVI, el 21 de enero de 1793, con el voto a favor de esa condena por parte de Danton, que se unió a lo que había solicitado el jacobino Robespierre, su aliado político, a pesar de haber estado en Bélgica durante el proceso, y primero haber solicitado como sanción el destierro.

El 6 de abril de 1793, fue creado el Comité de Salvación Pública, para mantener la seguridad de la República, ante la amenaza de las potencias extranjeras, órgano que Danton también integró.

El 2 de junio de 1793, el gobierno de la Convención quedó a cargo de los jacobinos, liderados por Robespierre, cuyo mandato, denominado “Régimen del Terror” se extendió hasta julio de 1794.

El 1 de enero de 1793, había sido creado el Comité de Salud Pública, con el nombre de Comité de Defensa General, integrado por Danton, quien ya cansado de luchar infructuosamente por lograr la paz con las potencias extranjeras, había moderado su actitud. También funcionaba el Comité de Seguridad General. El Gran Comité de 12 miembros fue creación de los jacobinos, con represión total de toda aquellas manifestaciones contrarias a la ideología de la Revolución, donde Robespierre alcanzaba cada vez, mayor liderazgo, hasta ejercer el poder total.

En el mismo seno del gobierno revolucionario las tendencias no eran unánimes. Robespierre quería crear una república deísta, los ultra-revolucionarios, más extremistas aún que Robespierre, apoyaban el ateísmo, prefiriendo Danton inclinarse al sector de los indulgentes, que querían terminar con el régimen del terror al que ya consideraban innecesario.

Robespierre en pos de la unidad de la causa revolucionaria, primero acabó con Hébert y los ultra-revolucionarios, y luego con su antiguo camarada Danton, quien intentó sin éxito refugiarse en Arcis-sur-Aube, a quien condenó a morir en la guillotina, acusado de traición, de conspiración a favor de los monárquicos, de malversación de fondos, e implicancias en la liquidación de la Compañía de las Indias, calificada de fraudulenta. La ejecución se cumplió, el 5 de abril de 1794, junto a sus camaradas indulgentes.

Su lucha idealista moderada, su gusto por los lujos, sus contradicciones, y las dudas sobre su honestidad, tal vez sembradas ex profeso por sus opositores políticos, dividieron a los historiadores, siendo un personaje sumamente polémico. Su vida fue llevada al cine en 1983, por Andrzej Wajda.