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La Batalla de Bailén

Publicado por Hilda

ANTECEDENTES

Batalla de BailénLa invasión napoleónica a España encontró una gran resistencia, formándose Juntas que resistieron el avance enemigo, aunque los franceses parecían no darse cuenta de la magnitud de la oposición, confiados en sus fuerzas y capacidad militar.

En la batalla de Puente Alcolea, del 7 de junio de 1808, el ejército francés, conducido por Dupont, había resultado victorioso, frente a Don Pedro Echavarri, que con sus 15.000 hombres, en su mayoría campesinos, bloqueaba el paso hacia Córdoba. Esto le permitió a Dupont, entrar en esa ciudad, que terminó saqueada, y luego abandonada, ya que se consideró estratégico dirigirse hacia Andujar, para impedir que el ejército español se ubicara de tal modo, que le impidiera entrar en Madrid.

Con el mismo propósito el general Vedel, avanzó hacia La Carolina, para unir sus fuerzas con las de Dupont. Sin embargo, éste desaprovechó la oportunidad de reforzarse y atacar, y envió a Vedel hacia Bailén.

En este período, paralelamente, se producían otros encuentros, que al principio resultaron desfavorables a las tropas francesas, como el de Bruch, ocurrido el 6 de junio y el de Valencia el 28 de ese mismo mes. Pero la derrota española en Medina de Río Seco, el 14 de julio de 1808, donde sucumbieron al mando de Blake y Cuesta, le permitió al ambicioso ejército de Napoleón, consolidar su posición en España, al poder ingresar a Madrid, y coronar a José I, hermano de Napoleón.

Los españoles que habían establecido su cuartel en Utrera se dirigieron hacia Sierra Morena, al mando de Castaños, para impedir que las fuerzas francesas siguieran avanzando, realizando hábiles maniobras, de cambios direccionales, que obligaron al ejército napoleónico a dividir sus fuerzas en varios frentes.

Las tropas al mando de Castaños, formada por 12.000 combatientes tendrían como fin dirigirse hacia Andújar. Teodoro Reding, en Granada, preparó también un frente de batalla, con 10.000 hombres con destino hacia Mengíbar, lo mismo que el marqués de Coupigny, al mando de 8.000 efectivos, que se dirigirían hacia Villanueva. A estas fuerzas españolas se les unirían para la contienda las de Félix Jones, y una reserva, conducida por Manuel de la Peña.

Si bien Reding, supuestamente había fallado en su estrategia, y se retiró de la contienda ante la magnitud de las fuerzas de Vedel, esto era solo un ardid. Vedel confiado que todas las fuerzas españolas se concentraban al mando de Castaños, acudió en ayuda de Dupont. El objetivo de dividir a los franceses estaba cumplido. Ahora, sí con las pocas defensas francesas, Reding, pudo atravesar la zona y cruzar al otro lado del Guadalquivir. Gobert, que había acudido en ayuda de los franceses, pereció en el intento.

Dupont, desorientado retrocedió hacia Bailén, donde estaban las tropas, de Vedel, que acudían en su ayuda.

Sin embargo, Vedel, fue nuevamente forzado por el ingenio español a dirigirse hacia La Carolina, donde supuestamente había una amenaza española contra Dufour que había tomado el lugar de Gobert, y se preparaba para evitar el cierre del paso que los conduciría hacia Madrid. Esto sólo sirvió para dividir y hacer flaquear las fuerzas francesas, ya que el supuesto ejército era sólo un grupo de distractores que habían cumplido muy bien su finalidad.

Reding, sumó a sus fuerzas las de Coupigny, y avanzó hacia Bailén por orden de Castaño.

EL ENCUENTRO

El escenario de la lucha fue la ciudad de Bailén, en la provincia de Jaén, situada al sur de España, lugar que debían transitar indefectiblemente los franceses si deseaban entrar en Andalucía, y el día señalado, un caluroso 19 de julio de 1808. La Grande Armée, el ejército francés, conducido por el general Pierre Dupont se enfrentó a las fuerzas españolas a cargo del general Castaños. Ambos ejércitos reunían algo más de veinte mil hombres.

Contaron con la incondicional ayuda del pueblo de Bailén, imprescindible para el aporte de agua a las tropas y a la artillería. Como símbolo de ese aporte solidario popular, la ciudad de Bailén se representa con un escudo en el que se muestra un cántaro, en memoria de una legendaria mujer, María Bellido, que en su persona encarna la fuerza de la gente, en ayuda de la recuperación de su propia identidad nacional.

La rendición de BailénEl triunfo español, significó abrir el camino hacia la recuperación del territorio español.

José de San Martín, quien sería uno de los principales héroes de la independencia latinoamericana, con respecto a su madre patria, España, esta vez peleó con bravura en su defensa, poniéndose siempre del lado de las causas independentistas.

CONSECUENCIAS

El general Dupont fue repatriado a Francia, junto a sus oficiales, mientras el resto de la tropa fue conducida a la isla de Cabrera, contrariando el acuerdo que imponía que la integridad de la tropa volvería sana y salva a su lugar de origen.

Los franceses dudaron de su capacidad militar tras la derrota, y Napoleón debió reunir un nuevo ejército para proseguir la lucha por la conquista del dominio español, que se le escapaba de las manos, tras la retirada del rey José I de Madrid.

Fue sólo el primer paso hacia la independencia definitiva ya que Napoleón logró su propósito poniendo bajo su mando a casi toda España, exceptuando Cádiz, pero sembró la duda en todo el continente europeo sobre la real capacidad de un ejército supuestamente invencible.