Historia

Majencio

Publicado por Hilda

Majencio, nacido aproximadamente en el año 278, era hijo del emperador Maximiano, de Occidente, quien fuera el augusto que acompañó a Diocleciano, emperador de Oriente, en la Tetrarquía (sistema de gobierno compuesto por dos augusto y dos césares) y su compañero de armas.

Cuando en el año 305 Diocleciano renunció a su cargo, convenció a Maximiano de que hiciera lo mismo, debiendo asumir, de acuerdo a lo establecido, los césares como augustos. Estos césares eran Galerio y Constancio Cloro (padre de Constantino) respectivamente. Como nuevos césares fueron designados Maximino Daya (de Galerio) y Severo (de Constancio Cloro). Quedaban fuera de las aspiraciones imperiales tanto Majencio, hijo de Maximiano y yerno de Galerio, como Constatino, hijo de Constancio Cloro. Sin embargo, ambos no se resignarían a ser relegados.

A la muerte de Constancio Cloro, Constantino fue proclamado emperador por sus tropas; y en Roma, Majencio también se encaramó al poder como “prínceps”, con la ayuda de sus tropas de Italia y África, el 28 de octubre del año 306. A esta designación se opusieron Severo y Galerio, que odiaba a su yerno porque no lo respetaba y según su criterio, no poseía espíritu guerrero. Majencio fue considerado usurpador, y para forzar su derrocamiento se envió a Severo con sus tropas. Sin embargo los hombres con los que pensaba combatir Severo eran los mismos que antes habían obedecido a Maximiano, y rechazaron combatir contra el hijo del viejo emperador. Además recibieron donativos de plata de parte de Maximiano. Ante esas circunstancias, Severo se rindió y fue asesinado a pesar de que Majencio había prometido respetarle la vida.

En el año 307, junto a su padre, Majencio se confirió la categoría de augusto (Maximiano la de bis augusto). Sin embargo Maximiano realizó una acuerdo con Constantino, quien al casarse con una hija de Maximiano se convirtió en su yerno, quedando Majencio fuera del mismo, aunque luego perecería Maximiano en su celda, a la que fue conducido por Constantino acusado de traición.

Dueño de Italia y de África, Majencio se alió a Maximino Daya, augusto de Oriente tras la muerte de Galerio en el año 311, quien había dictado el Edicto de Tolerancia para impedir la persecución de los cristianos.

Mientras en la parte occidental del imperio, Constantino y Licinio daban publicidad al edicto de Tolerancia, Maximino lo resistió, y aunque suspendió las persecuciones, usó la táctica de las difamaciones, torturando a los cristianos para obtener la admisión de actos monstruosos.

Para legitimarse en el poder usó la memoria de su padre, haciéndose llamar “Felicis Divi Maximiani”. Sin embargo el pueblo no lo aceptó pues el alza de precios e impuestos creo gran disgusto popular y también en el Senado.

Viendo en decadencia su imagen intentó congraciarse con los cristianos, devolviéndoles los bienes confiscados, pero fue inútil. Constantino, por escrito le exigió que abdique, y luego, ante la negativa, le declaró la guerra, enfrentándose ambos en la batalla de Puente Milvio, donde Constantino, habiendo recibido la protección del Dios cristiano cuyos símbolos grabó en sus escudos, venció a Majencio, quien falleció en la huida al derramarse el puente construido para esos fines.