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Enrique VIII

Publicado por Hilda

Enrique VIIINació el 28 de junio de 1491, en el Palacio de Placentia, en Greenwich, en la ribera sur del Támesis (Inglaterra).

Con el matrimonio de sus padres, Enrique VII e Isabel, se unieron las casas de Lancaster y York, a las que pertenecían, respectivamente, iniciándose la dinastía Tudor, por el abuelo paterno de Enrique. De este matrimonio nacieron siete hijos: Arturo, Margarita, Enrique, Isabel, cuyo deceso se produjo a la edad de tres años, María, Edmundo, fallecido al año y cuatro meses de edad, y Catalina que murió al nacer, y junto a ella, su madre, Isabel de York, en el año 1503.

Enrique se destacó en las artes literarias y en la música, gran deportista, y mejor jugador de dados.

A la edad de 11 años, Enrique, que era duque de York, por ser el segundo en la sucesión del trono, luego de su hermano mayor, Arturo, príncipe de Gales, tomó este lugar al fallecer Arturo, poco después de su casamiento con Catalina, hija de Fernando de Aragón, en el año 1501. Este matrimonio fue anulado por dispensa papal, y se arregló un nuevo matrimonio entre la joven viuda y el hermano del fallecido esposo, ahora heredero del trono, Enrique, para mantener los lazos de unión con España, que para 1505, Enrique VII ya no estaba interesado en mantener, y obligó a su hijo a deshacer el compromiso alegando que se había realizado sin su consentimiento.

El 21 de abril de 1509, falleció el rey Enrique VII, correspondiendo el trono a su hijo, que fue coronado como Enrique VIII. Finalmente se casó con Catalina de Aragón, el 11 de junio de 1509. Trece días después, los reyes fueron coronados en la Abadía de Westminster.

Luego de la Guerra de las Dos Rosas Inglaterra aparecía unificada, fortaleciéndose el poder real en perjuicio del de los nobles, que si bien mantuvieron sus propios tribunales, esas sentencias eran revisadas, por la Cámara Estrellada. Los Ministros de Enrique VII, Richard Empson y Edmund Dudley, que habían acosado a la población con impuestos y confiscaciones, fueron ejecutados por el nuevo soberano.

Desde 1507 comenzó a tener gran preeminencia en los asuntos de gobierno, el sacerdote Thomas Wolsey, siendo nombrado Consejero en 1511, año en que Inglaterra pasó a conformar la Liga Católica, contra Francia, potencia contra la cual, Enrique VIII, luchó personalmente, logrando una gran victoria en la batalla de Guinegatte.

Realizó una política de acercamiento con el emperador Carlos I de España, y con el advenimiento de la reforma luterana, fue proclamado “defensor de la fe” por la iglesia católica, al escribir un libro criticando a Lutero “Tratado de los siete sacramentos” siendo ejemplo para el catolicismo.

De su matrimonio con Catalina, solo había sobrevivido una niña, María, y el deseo de Enrique de tener un heredero varón le llevó a tratar e divorciarse de su esposa, denominándose a tales sucesos, “cuestión real”. Junto a sus ministros, intentó anular el matrimonio, pero obtuvo la negativa del Papa Clemente VII.

Firmó la paz con Luis XII de Francia, pero en 1520 reafirmó su alianza con España, para luego volver a ponerse al lado de Francia.

Cranmer sucedió al Arzobispo de Canterbury, declarando la ilegalidad de toda apelación ante el Papa, y nulo el matrimonio de Enrique y Catalina, lo que le permitió al rey contraer enlace con la cortesana Ana Bolena, el 25 de nero de 1533. La sanción papal fue la excomulgación de Enrique, en 1533. La respuesta del rey inglés fue el Acta de Supremacía de 1534, con aprobación parlamentaria, dictada por consejo de Thomas Cranmer, nuevo arzobispo de Canterbury y por el comerciante Thomas Cromwell, que ponía a Enrique VIII, en la máxima jerarquía de la iglesia en Inglaterra, desconociéndose la autoridad del Papa. Asumiendo el rey el máximo poder temporal y espiritual, obligó a los funcionarios y miembros del clero a que lo reconocieran como tal., prestándole juramento de fidelidad. Los que se negaron a hacerlo, como Fisher, que había sido su tutor, y el canciller Tomás Moro, fueron ejecutados.

En septiembre de 1533, nació su hija Isabel, y luego sobrevinieron dos embarazos frustrados sin dar al rey un heredero varón. Ana comenzó a sufrir el hostigamiento de su marido, quien manifestaba que su matrimonio había sido maldecido por el propio Dios, tras perder un último embarazo. Ana fue acusada por su propio esposo, de traición, adulterio, e incesto, torturándose a personas para que declarasen en su contra. El 19 de mayo de 1536, murió decapitada.

Para ese entonces, el rey ya había hallado otra futura reina para Inglaterra, Jane Seymour, con quien se casó ese mismo año, dictando un nuevo acto sucesorio, por el cual María e Isabel, eran excluidas de la sucesión, dando legitimidad a los herederos que nacieran de esta nueva unión.

El 12 de octubre de 1537, por fin el deseo real fue cumplido, al nacer Eduardo. Doce días después falleció Jane Seymour, como consecuencia del parto.

Secularizó los bienes de la iglesia, y realizó algunas concesiones en materia de dogma, como abolir el celibato de los sacerdotes, pero no afectó la jerarquía eclesiástica. Fue por la gran influencia de Thomas Cromwell y otros comerciantes y nobles ingleses que rompió definitivamente con Roma. Ordenó el cierre de los Monasterios, pasando los bienes a manos estatales, que los vendían a bajo costo, fomentando la especulación. Los levantamientos de los católicos fueron violentamente reprimidos. Forjó así la simiente del protestantismo que sería impuesto por su sucesor.

El 6 de enero de 1540, contrajo enlace nuevamente con Ana de Cleves, de influyente familia protestante, para asegurarse el apoyo de estos, en caso de un ataque católico, y para asegurar su sucesión ya que tenía un solo heredero, y su salud era débil. El 9 de julio de 1540, el matrimonio se anuló, aduciéndose su no consumación. Cromwel, que se había ganado el odio de muchos, por haberse quedado con gran parte de las riquezas obtenidas de la disolución de los monasterios y había impulsado al rey a casarse con Ana de Cleves, mujer muy fea, y con marcas de viruela, que fueron disimuladas por su retratista, perdió el favor real, y murió ejecutado, el 28 de julio de 1540.

La prima de su anterior esposa, Ana Bolena, llamada Catalina Howard, fue la elegida para casarse con Enrique VIII, matrimonio que se celebró el día que Cromwell era ejecutado. No le fue mejor a esta dama, que fue acusada de adúltera, y ejecutada, el 13 de febrero de 1542.

Su última esposa fue Catalina Parr, con quien se casó el 12 de julio de 1543. Tuvo gran influencia sobre los hijos de Enrique, con quien mantuvo buena relación, logrando la reconciliación con las hijas nacidas de sus matrimonios con Catalina de Aragón y Ana Bolena, María e Isabel, respectivamente, que lograron ser incorporadas como sucesoras luego de su hermano Eduardo. Enrique VIII, falleció el 28 de enero de 1547, siendo sucedido por su hijo, como Eduardo VI.